martes, 16 de febrero de 2010

Mayores con reparos

Hoy no se acuerda casi nadie de la férrea clasificación moral que hace tres o cuatro décadas se empleaba para la exhibición de películas en salas cinematográficas. Incluso recuerdo que hubo un tiempo en el que de algunos filmes se decía que eran "para mayores con reparos". Yo siempre me pregunté qué eran esos reparos. Eran reparos morales. El censor decía con eso: ojo esto no es recomendable ni siquiera para adultos. Esto viene a colación porque en Italia la película Paranormal Activity ha provocado ataques de pánico y taquicardias en algunos espectadores. Está clasificada ´para todos los públicos´ como si de un episodio de La abeja Maya se tratara. En EEUU la película está prohibida a menores de 17 si no van acompañados. En Reino Unido prohibida a los 15 años, frente a los 16 de Holanda y Alemania. En fin, criterios dispares. No me gustan nada los censores, pero creo que hemos entrado en una espiral del ´todo vale´ con tal de llenar las salas de público.

Recuerdo en la época del destape haber ido al Imperial de Sevilla con mi padre a ver Jesucristo Superestar . Llegamos antes de que acabara la primera sesión, que era porno. Tiempos de programa doble. Invitaron a mi padre a ver el final de la película X. Mientras, yo debía permanecer en los pasillos. El se negó en redondo. Y nos quedamos los dos sin mirarnos, sentados en el hall, con cara de circunstancia, mientras retumbaban en las paredes del viejo teatro los gemidos levemente perceptibles de la apoteosis final de Emmanuelle Negra . Ahora creo que esta peli es apta hasta para preescolares y niños de pecho. Refrán: Si en un cine hay fuego: humo.