martes, 27 de marzo de 2012

Historias de la economía sumergida

Lunes a las ocho y media de mañana ante la puerta de la sucursal de una entidad de ahorro. Soy el primero y me pide la vez un hombre en chandal y sudadera negra, de unos 50 años. Poco a poco va llegando cada vez más gente. Abren a las nueve, así que toca media hora de espera en medio del frío y de los rostros de circunstancia de mis compañeros de cola. El hombre del chandal habla a gritos y con aspavientos.

--Ya te digo yo que va a venir mucha gente a la cola. El sábado por la mañana cobré el paro. Yo vengo a ingresar, pero ya cobré el paro.

El ciudadano del chandal sigue nervioso como un pájaro y se queja con fuerza ante la larga cola de que no abran más pronto la sucursal.

--Hombre, si está usted en el paro no tendrá prisa, le contestan.

--Es que llego tarde para hacer unas chuscas...

La declaración causa la indignación entre algunos de los que esperaban, pero no le dicen nada. Para tratar de limar asperezas otro compañero de cola le comenta:

--No llueve y como sigamos así la sequía va a ser muy dañina.

--Pues a mí me da igual, mientras abra el grifo y salga agua..., respondió el ciudadano.

Afortunadamente, una mujer de los presentes le llamó la atención por aquel comportamiento tremendamente insolidario. Así somos. Nos da igual todo mientras no nos toquen lo esencial. Entonces ya protestamos y quizá sea demasiado tarde. Sospecho que en el mundo de la economía sumergida hay mucha gente que solo busca sobrevivir y otros que han encontrado en esa oscuridad el espacio perfecto para tomarnos el pelo a base de bien. Refrán: Barriga llena no siente pena.

martes, 20 de marzo de 2012

40 años de 'A cántaros'

Hay canciones que marcan una vida, que son un pedazo de historia hecha música y verso. Extremadura tiene la suerte de tener entre sus poetas y músicos al autor de un himno universal. Si Pablo Guerrero en vez de haber nacido en Esparragosa de Lares lo hubiera hecho en una gran capital europea o americana ahora estaría probablemente al mismo nivel de reconocimiento público que Bob Dylan o Leonard Cohen . Hace cuarenta años que compuso una canción llamada A cántaros , que clamaba un cambio hacia la justicia y la igualdad social frente a los poderosos. Cuatro décadas después la situación es la misma, o casi. Ahora el tirano es el mercado, más invisible, más sutil, pero al fin y al cabo quien nos ata a pesar de que estamos 'hechos de nubes'. Sorprende la terrible vigencia de esta canción, comparable a temas como A galopar (Paco Ibáñez-Alberti ), Al vent (Raimon ), La estaca (Lluís Llach ), El canto a la libertad (José Antonio Labordeta ), o Al alba (Aute ). Pablo Guerrero es el único extremeño que ha ofrecido un recital en el Olympia de París. Y uno de los que con más fuerza se opuso a la Central Nuclear de Valdecaballeros. Fue el primero en denunciar todo lo que ahora se cierne sobre nosotros. Ahora su 'memoria de humo' se pierde en la niebla de los años. Sus pulmones y su voz tienen el timbre ajado del paso del tiempo. El próximo 11 de abril dará un concierto en el Teatro Fernando de Rojas de Madrid recordando los 40 años de A cántaros . . El y Luis Pastor nos recuerdan que los cantautores no han muerto, aunque a algunos les gustaría que sus voces no siguieran denunciando injusticias. Refrán: Abril abrilero, cada día dos aguaceros .

martes, 13 de marzo de 2012

Gourmets

Tras mi última visita al Salón de Gourmets de Madrid me asalta una duda: ¿Soy realmente un gourmet o un auténtico tragaldabas? Me gusta comer, lo reconozco. Eso de quedarse con un poquito de ruido de tripas después del almuerzo por aquello de guardar la línea no va conmigo. La barriguita poscuarentona se ha convertido en una compañera de la que me cuesta desprenderme. Mis intentos de ponerme a dieta son conocidos por quienes me rodean, pero desde que llegué a Extremadura todo está tan bueno...

--Juanjo, ¿ya estás abriendo el frigorífico otra vez? ¡Si ya es hora de acostarse!, que inquieren a veces con los brazos en jarras.

Pues sí. Todo alimento me apela a engullirlo y degustarlo, desde la cachuela matinal, pasando por la chanfaina con arroz, hasta los repápalos de última hora. ¿Y qué puedo hacer? Me han comentado que algunos ponen fotos suyas desnudos con las lorzas al aire en la puerta del frigorífico, pero me parece, sobre todo, muy poco erótico y nada agradable.

Lo cierto es que en Gourmets se potencian los alimentos sorprendentes. Allí, en la sala de prensa, probé un salmorejo con maíz y sobrasada, y una especie de yema de huevo que, en realidad, era queso azul con manzana y bronce comestible. A mí me gustan esas viandas tan mariquitas, pero disfruto igual con un buen queso artesano de la tierra y un pitarra. Gourmets este año ha adelgazado. La crisis ha devorado la participación de muchas empresas. Sin embargo, todos tenemos la mala costumbre de comer todos los días. Algunos más que otros. Eso asegura para siempre el éxito de Gourmets. Por mi parte no quedará, seguro. Refrán: A falta de faisán, buenos son rábanos con pan

miércoles, 7 de marzo de 2012

B.B. y los gatos

Brigitte Bardot , mito sexual de la década de los 60 y exactriz francesa, ha vuelto a demostrar su profundo amor por los animales. Ella junto a la asociación protectora que lleva su nombre ha escrito al alcalde de Oviedo, Agustín Iglesias , para que retire el bando municipal contra los gatos callejeros. Al parecer son alimentados por voluntarios en cinco puntos de la ciudad ovetense, pero los padres de alumnos de un colegio han denunciado que los felinos son un síntoma de insalubridad. ¡Cuánto desconocimiento sobre el mundo gatuno revela esa denuncia! No conozco animal más limpio, que cuide más su higiene personal, ni tan respetuoso. Cáceres está llena de gatos callejeros que son alimentados por sus vecinos y que constituyen una garantía contra las plagas de roedores y murciélagos. Hace un tiempo que no veo a una gatita urbana que vive en un garaje de la calle Médico Sorapán y a la que he alimentado. Tenía una camada de la tampoco he vuelto a saber nada y eso me llena de bastante desazón. En las traseras de los jardines de la Casa Pedrilla hay toda una pandilla gatuna que se suele poner al sol, hierática, en unas barandillas. A los jardines de Nuevo Cáceres han ido a parar los gatos que habitaban en la obra de la nueva comisaría. Alguno deambula por los bajos de los coches y tengo miedo de que acabe atropellado. Son curiosos los nobles sentimientos que despierta este felino que se te sienta en las rodillas cuando duermes la siesta, que te maulla entre las piernas cuando quiere comida y se frota con tu cuerpo para saludarte. No entiendo cómo puede haber quienes quieran eliminarlos de sus calles. ¡Qué animales! Refrán: Cuando el gato está ausente los ratones se divierten.