martes, 19 de diciembre de 2023

Como si no hubiera un mañana

Estamos inmersos en la cultura de comer a ‘jinchapelleju’ en medio de un mundo inmerso en guerras y hambre

Después, tras varios años lastrados por la pandemia, hemos vuelto a las comidas y cenas de Navidad, bien con los amigos o bien con la empresa, elija el lector en cuál lo pasa mejor. Cáceres el pasado fin de semana, desde el viernes, se convirtió en un gran showcooking en el que los restaurantes y bares colgaban el cartel de 'completo'. Estamos inmersos en la cultura de comer a ‘jinchapelleju’ bajo el lema de «en casa del pobre antes reventar que sobre». Yo me pregunto dónde está la tan cacareada crisis económica. Y hacemos este ritual de la ingesta sin conocimiento en medio de un mundo convulso, sumergido en dos grandes guerras que nos tocan relativamente de cerca. 

¿Es ético este ritual del jamón ibérico y los langostinos cuando en Oriente Medio practican el ojo por ojo? ¿Tiene sentido comer hasta la náusea cuando en Ucrania viven bajo el bombardeo indiscriminado de una superpotencia? ¿Tenemos la conciencia tranquila cuando cambiamos de armario cada temporada mientras nuestras playas se llenan de migrantes en busca de un futuro mejor jugándose el cuello? Personalmente, creo que no, que habría que poner cierta mesura en estos hábitos opuestos a la concepción primigenia de la Navidad o a la fraternidad humana. Veo las tiendas a reventar, en una especie de vorágine consumista de artículos que en unos días acabarán arrinconados en los trasteros. Siento enormemente que nos hayamos creado necesidades vanas y efímeras para sostener una economía nada igualitaria ni justa. Me da pena la explotación a la que se someten muchos empleados contratados temporalmente estos días, sabiendo que sus contratos acabarán en breve y que solo añadirán una prórroga a su miseria.


miércoles, 13 de diciembre de 2023

Camaradería con un pitarra

En un mundo en el que las técnicas de marketing están a la orden del día, en el que todo está pensado y medido para vender, se agradecen gestos de camaradería y hermandad. Es lo que nos pasó el pasado viernes en las Jornadas Gastronómicas del Cerdo Ibérico en Montánchez. Con el pueblo a reventar, en el que no se podía dar un paso ni en la carpa ni en los soportales del ayuntamiento, estábamos degustando ese guiso caliente de cerdo, que supo a gloria en el llamado Puente de La Pura. En medio de esa delectación se nos había acabado el diminuto vasito de vino al que dan derecho los tiques. Bajo la estoa habilitada para la degustación, estábamos demasiado lejos para volver a la carpa a canjear los vales. En esto que nos oyeron unos comensales locales. «¿Os habéis quedado sin vino? Probad el de la zona». Y nos escanciaron a todos y cada uno de los que formábamos el grupo una ronda de vino pitarrero, pero exquisito. 


Afortunadamente, todavía quedan quienes están pendientes del otro, de los forasteros, de los invitados que llegan a un pueblo. Ese gesto de camaradería dice mucho del espíritu local. Nada de considerar al externo como extraño o intruso. Todo lo contrario, se trata de agasajarlo para que regrese en la próxima ocasión con más ganas de invertir y de pasarlo bien. Así es como se hacen grandes las fiestas. Por cierto, que hacía años que no iba a Montánchez a las Jornadas del Cerdo Ibérico y había ambientazo. La lluvia dio un respiro ese día y las colas para comprar tiques eran kilométricas, los expositores de las distintas marcas comerciales hicieron negocio y en la calle la charanga animó un día en el que gracias a la concordia de los montanchegos no hubo forasteros ni turistas. Es lo que tiene el cerdo ibérico como animal totémico de la sociedad extremeña. Tiene un poder de pegamento vital indiscutible. Y es que donde esté un buen jamón ibérico elaborado con mimo, en su punto de sal y bien cortado, que se quiten todos los demás placeres terrenales. Después está ese Castillo de Montánchez, cuya ascensión es una ruta recomendable y que merece una visita en cualquier momento del año. Montánchez tiene un encanto señorial que trasciende lo anecdótico para conferir al pueblo un aire noble, un recuerdo de tiempos pasados que enciende la imaginación del visitante y lo transporta a otras épocas. Bien por ese trago de vino, pequeño pero grande a la vez, que demuestra que el espíritu de concordia, el de la auténtica fraternidad humana, aún no se ha perdido para siempre en el algoritmo de Google.

martes, 5 de diciembre de 2023

Aubeck, un erudito en Badajoz

Este profesor de inglés afincado en la ciudad del Guadiana es uno de los mayores expertos mundiales en fenómenos aéreos anómalos

Quizá sea un dato anecdótico, pero lo cierto es que Chris Aubeck, uno de los mayores expertos mundiales en fenómenos aéreos inexplicables, ahora llamados UAPs (antes ovnis) vive actualmente en Badajoz. El dato lo hizo público durante una entrevista en el pódcast de conspiraciones Clave 45. Otra curiosidad es que la vocación de Aubeck se consolida tras ver un ovni en Talarrubias. 

El profesor de inglés (que también dio clases en Cáceres) es actualidad porque acaba de publicar un libro titulado ‘Platillos’ en el que curiosamente desmonta todo el folclore que se diseñó desde finales de los años cuarenta en torno a los mal llamados ‘platillos volantes’. Este erudito y ratón de hemeroteca ha dedicado su vida a recopilar avistamientos anteriores a 1947 y en este último trabajo demuestra que describir a los ovnis como discos es fruto de un poso cultural que tiene que ver con la cultura pulp y los cómics de los años 40 y 50, entre otras cosas.

Los periodistas en todo esto tenemos que entonar el mea culpa. La era moderna de los ovnis comenzó con el avistamiento del piloto Kennet Arnold el 24 de junio de 1947 sobre el monte Rainien. Curiosamente, el artículo original en el East Oregonian con el reporte de Bill Beguette no contenía esa descripción de ‘platillos volantes’. Sin embargo, en Associatte Press (AP) quisieron darle más gancho a la historia y editaron su texto con la frase «objetos brillantes parecidos a platillos». Más que nada para echar unas risas. Y la expresión ‘flying saucers’ se hizo viral, cuando, en realidad, los avistamientos con forma de plato invertido son minoritarios. Arnold negó durante toda su vida haber visto objetos voladores de esta forma y sí como «alas de murciélago». Sin embargo, esta ha sido la manera en la que hemos representado a las naves espaciales extraterrestres en el arte y la literatura. ‘Platillos’, el trabajo de este Aubeck es riguroso y espectacular, especialmente si te gusta la historia. Y recuerden que ese talentazo vive en Extremadura, en la ciudad del Guadiana.  


martes, 28 de noviembre de 2023

Ángel Martín, terapia grupal

En un país en el que el 6,7% de la población está afectada por la ansiedad, exactamente la misma cifra de personas con depresión, espectáculos como el de Ángel Martín son no solo pertinentes, sino que muy necesarios para el común de los mortales. Este actor, que triunfa en Youtube cada día con un vertiginoso informativo de solo un minuto de duración, es muy valiente, valiente de verdad.

La enfermedad mental –que uno de cada cuatro españoles padecerá a lo largo de su vida- está estigmatizada, al menos en nuestra sociedad. Las visitas al psiquiatra o al psicólogo con consideradas poco más o menos como vergonzantes o circunscritas solo para los ‘locos’, como con desprecio llamamos a quienes se apartan de lo que llamamos normalidad y necesitan terapia. Y todos en algún momento podemos estar ‘locos’.

Este actor ha pasado por el infierno de la enfermedad mental, de los internamientos y tratamientos, y habla sin tapujos de su experiencia. No es un espectáculo para reír a mandíbula batiente, pero sí te hace sonreír durante los 80 minutos de monólogo hilarante. Ángel Martín se convierte así en una excelente terapia grupal para todos los asistentes a su show. Las entradas deberían dispensarse en farmacias, quizá con receta. Lo cierto es que el millar de espectadores que el sábado asistió al Palacio de Congresos de Cáceres salió mejor de lo que entró y eso vale mucho más que el precio de cualquier entrada. Cada asistente interioriza las palabras del actor y hace suyos sus ejemplos, porque lo que él cuenta es una experiencia universal.


 Además de hablar del universo de la pareja y las relaciones humanas, gran parte de lo que contó se centró en las redes sociales. Efectivamente, éstas no son un ente externo y abstracto a nosotros, sino que están alimentadas por nuestras pulsiones y miserias. De nosotros depende construir una sociedad mejor con ellas. Ese es el reto. Punto para los locos. O quizá sería mejor decir: «Ángel Martín, este loco es un punto».

miércoles, 22 de noviembre de 2023

José María Gallego, un facilitador

 José María Gallego, un facilitador



Agroganadera cumplirá 40 años en 2024, sin este trabajador callado y discreto, pero lo hará gracias a esa labor en silencio de muchos profesionales del campo como él
En este mundo donde todo es confrontación, cainismo y polémica, siempre hay luces que te guían en este camino de sombras. La semana pasada la Feria Agroganadera de Trujillo rendía merecido homenaje a este veterinario responsable en gran medida de que este encuentro especializado enfile sus cuatro décadas de existencia. Su viuda e hijo recogían una placa y recibían el aplauso de todo el agro extremeño congregado en Trujillo. Recuerdo cuando le entregaron en 2010 uno de los Premios Agroganadera. Me definieron entonces a Gallego como un “facilitador”. Este veterinario ponía las cosas fáciles para el desplazamiento de animales y la celebración de espectáculos taurinos, que tienen su mandanga de burocracia. Hacía llevadero lo complejo.
Sus compañeros y familia finalizaron su homenaje en la feria con el adagio "El amor es siempre más fuerte que la muerte". Sin duda. Ahora esperemos que las obras del nuevo salón de actos finalicen por fin y pueda llevar el nombre de este trabajador público caracterizado por su discreción. Las ferias de nuestra región son fruto de un trabajo callado de mucha gente que, en silencio y sin alharacas, se esmera en el esplendor de nuestro sector primario. La Feria de Trujillo es un ejemplo. Por ella he visto pasear a Juan Andrés Fernández, veterinario que a sus 103 años aún se da un garbeo por las naves de ganado. La Agroganadera también es el esmero que, por ejemplo, Juan Luis Muñoz Carrasco pone en la preparación de sus limusines, botón de muestra de la pasión con la que los ganaderos y sus mayorales de las distintas razas se entregan a sus animales. El año que viene la Agroganadera volverá, sin José María, pero lo hará gracias a esa labor en silencio de muchos profesionales del campo como él.

martes, 14 de noviembre de 2023

'Now and then', cadáver exquisito

 'Now and then', cadáver exquisito

Por una vez la inteligencia artificial se ha empleado en hacer feliz a millones de beatlemaníacos

El mundo esperaba con fruición Now and then, oficialmente la última canción de The Beatles. Con la ayuda de las redes sociales este postrero trabajo de los cuatro fabulosos de Liverpool se ha convertido en una necesidad de consumo que ha llegado al último rincón del planeta. Siempre hay hambre de algo nuevo de este cuarteto único en la historia de la música, y más cuando ya ha pasado más de medio siglo desde que se separaron los añorados John, Paul, George y Ringo.


Lennon es el autor de este tema que la inteligencia artificial ha logrado resucitar como si se tratara de un cadáver exquisito. Al parecer, estaba grabado precariamente en una cinta de casete con un piano que en ocasiones ahogaba la voz del pacifista asesinado. Si la IA puede rescatar eso bienvenida sea. Es cierto que la restauración arroja una interpretación algo zombie, pero es su estilo, su forma de cantar y de componer, aunque suena artificiosa en algún fragmento. La guitarra de Harrison se ha añadido tras ser rescatada de un intento en los años noventa de grabar el tema.


¡Levántate y canta, John! Parece que eso es lo que han conseguido hacer Peter Jackson y Paul McCartney. Estoy imaginando a miles de productores buscando entre las miles de demos y maquetas de sus artistas fallecidos material similar para resucitar. No deja de ser un poco extraño después de tantos años oír la voz de este genio universal entonar unos versos tristes que tienen un indiscutible aire a despedida. Lo curioso es que cada trabajo de cada uno de ellos sea de facto una auténtica máquina de hacer dinero.


Al menos, por una vez, la IA se ha empleado en algo útil, que ha hecho feliz a millones de beatlemaníacos. Bienvenida sea, al menos, en este caso.

martes, 7 de noviembre de 2023

Cáceres ciudad sonora

Las ciudades tienen su propia música, ese ritmo interior que marcan los metrónomos hundidos en sus aljibes

Las ciudades antiguas sueñan con el mar y piden a los viajeros ofrendas de conchas, estrellas y gelatinosas algas verdes para restañar los siglos de silencio que erosionan sus adarves. Parece que sus piedras palpitan acompañando el rasgueo de una guitarra en la mañana luminosa, el melismático quejido del cantaor espontáneo, o los doce compases del blues que llegó desde un lamento azul nacido en el Misisipi profundo. Las ciudades -y Cáceres no es una excepción- tienen su propia música, ese ritmo interior que marcan los metrónomos sumergidos en sus aljibes, las lápidas de astronautas del pasado en los museos, o las desvencijadas gárgolas que son trasunto de las hazañas de quienes cruzaron ese añorado mar primigenio.

Allí, sobre los tejados del corazón de la ciudad, maullidos quejumbrosos y crotoreos de apareamiento acompañan a los transeúntes, ajenos al tráfago y a las exigencias urbanitas. Cáceres, ciudad sonora, acompasa al caminante con la cadencia de un arrullo materno, y le guía entre las plazas de Santa María y San Jorge, buscando el ritmo seguro de sus fósiles atrapados en las canterías milenarias.

Sí, Cáceres es un vals, con sus dos tiempos suaves y uno fuerte y asincopado, que hay que bailar mirando a sus ojos de agua antigua, consciente de que está tan hecha a la medida del hombre que la lluvia, las procesiones, la música o el teatro siempre la desbordan. Sin ese swing, sin ese tempo medio y rápido tan adictivo, los moradores de la ciudad caminaríamos desnortados, desprovistos de nuestro reloj interno, de esa deliciosa y atávica condena que nos devuelve al centro tonal de su canción medieval, atrapados en una melodía encadenada, que nos tiene in aeternum embelesados por una belleza que nos es imposible de comprender o de atrapar solo con la mermada red de nuestras pobres palabras.


martes, 31 de octubre de 2023

Halloween todo el año

'Truco o trato’ dice el aforismo de esta fiesta importada que nos quieren imponer bajo el horrible nombre de Halloween. Discúlpenme los adeptos a esta celebración yanqui con la que quieren subsumir la de Todos los Santos, que es mañana, y la de Todos los Fieles Difuntos, el miércoles. Entiendo que los niños pequeños se quieran disfrazar de mamarracho y que les guste que les den caramelos, pero donde esté un buen calbote que castañas asadas y un Don Juan Tenorio de José Zorrilla con toda su tragedia y su convidado de piedra que se quite toda esa patraña invasora que se nos cuela por televisores y redes sociales.

Además, tengo la impresión de que Halloween es todo el año. Últimamente, no sucede nada bueno ni hermoso en el mundo. Estamos con el pellizco en el estómago cogido cada vez que nos exponemos a las pantallas digitales. Que si China está a punto de entrar en guerra, que si en Ucrania los soldados fallecidos son legión, o que si el odio eterno entre Palestina e Israel se ha cobrado más vidas y de la forma más cruel imaginable. ¿Han calculado ustedes cuántos muertos salen por telediario? ¿Han pensado a cuántas imágenes horribles se exponen cada vez que entran en una red social? Eso sí que son muertos vivientes, de verdad, sin filtro, en un Halloween que dura todo el año. Y a veces la violencia la tenemos muy cercana como los sucesos recientes que hemos vivido en Cáceres. Si vas a un supermercado a comprar una botella de aceite te la encuentras con alarma, aunque el atraco sucede cuando pasas por la caja registradora… Me pregunto si habrá noticias buenas en este maremágnum de dolor en el que vivimos. Solo me queda recomendar no ver los telediarios ni exponerse a las redes sociales. Si acaso leer el Periódico Extremadura, que los periódicos son bálsamo para la mente y lenitivo para las heridas del corazón. Palabra.

miércoles, 25 de octubre de 2023

Encuentros en Galisteo

Extremadura está llena de pequeños paraísos, lugares perfectos para una escapada que no son los que aparecen en los titulares de Fitur o están especialmente detallados en los folletos turísticos. Sin embargo, tienen el atractivo de lo verdaderamente auténtico. Es lo que me pasó hace unos días recorriendo Galisteo, en pleno Valle del Alagón, cuya fortaleza almohade merece una pausada visita para descubrir entre sus adarves los misterios de una comarca dominada por las almazaras y los viejos secaderos de tabaco. Por cierto que, antes de llegar a Galisteo hay que pasar por San Gil, con el encanto de su medio siglo como municipio de colonización.

Su muralla rodea la villa casi por completo y tiene itinerarios marcados para conocerla. Si el día es claro, como fue el caso, la vista de la comarca es única. Recorriendo sus piedras me topé con un peregrino del Camino de Santiago, un muchacho joven y alto, con su gorro característico y su vieira. La muralla está muy bien reconstruida con cantería de río. La Torre Homenaje, que llaman Torre Picota, aún necesita un empuje a su reconstrucción, y es un vestigio del palacio del siglo XIV construido por los cristianos. Cerca de ella, unos turistas franceses de avanzada edad se mostraban sorprendidos de la belleza de la fortaleza. Les aconsejé que visitaran Plasencia o Cáceres cuando acabaran. Más tarde, en Monfragüe vi a unos ingleses que habían instalado toda suerte de telescopios en el mirador del Salto del Gitano. Iban pertrechados con ropa de camuflaje y unos teleobjetivos espectaculares con los que apuntaban a las peñas para fotografiar a las rapaces. Extremadura es así. Nunca defrauda, ni al viajero que se pierde en un pueblo fuera de los circuitos turísticos, ni al ornitólogo extranjero que busca una imagen única para llevarse a su país. El turismo es un motor económico sostenible, que si se gestiona con cabeza puede convertirnos en un referente nacional. 

martes, 17 de octubre de 2023

Crónica desde el banquillo

A ras de campo cada balón que se disputa se siente como si estuvieras en el propio terreno de juego donde se de jugaba el Veteranos CB Badajoz-Leyendas Atlético de Madrid


El maestro ‘Azorín’ escribía sus crónicas con la libreta apoyada en su chistera y que eso de alguna manera marcaba el tono de sus escritos. El pasado domingo tuve el honor de redactar la crónica del Veteranos CD Badajoz- Leyendas del Atlético de Madrid desde el banquillo albinegro. Todo ello fue gracias a la generosidad de nuestro compañero Paco Alegre, histórico del club albinegro y a la sazón segundo entrenador de la contienda.

No soy cronista deportivo y muy poco futbolero, por eso estar junto a veteranos iba a ayudarme a preparar mi trabajo. Y así fue.

De entrada, tenía el prejuicio de que un banquillo era una jaula de testosterona incontrolada. Nada más lejos de la realidad. Los convocados por Rogelio Palomo fueron ejemplo de educación, fair play y pundonor deportivo. Los gritos fueron siempre de ánimo y de consejos para mejorar el rendimiento.

A ras de campo las cosas se ven distintas que desde la grada. Cada balón que se disputa, cada jugada se siente como si estuvieras en el terreno de juego. El esfuerzo, los sudores, el cariño que se pone en cada pase se perciben muy cercanos, casi propios.
Después está la empatía con el débil. No nos engañemos, el Veteranos del Atlético de Madrid se nutrió de viejas glorias de sus filiales, que le dieron un extra de fuerza y velocidad que acabó decantando el resultado. Frente a ellos, los veteranos del Badajoz se esforzaron al máximo, con ‘Copito’ como principal estandarte, pero sin muchos frutos.

Cuando el fútbol se limita a ser solo fútbol los resultados son sorprendentes. Nunca he visto unas gradas tan agradecidas y tan volcadas con los dos equipos. En el Viejo Vivero se sudó y se sintió la camiseta a partes iguales. Ojalá los beneficios del partido den oxígeno suficiente a ELA Extremadura.

martes, 3 de octubre de 2023

El derecho de vivir en paz

 El derecho de vivir en paz

Tras 50 años del golpe de Estado de Pinochet empiezan las condenas a los asesinos de Víctor Jara

Se cumple ahora medio siglo desde la ignominia del golpe de Estado de Augusto Pinochet contra el gobierno legítimo de Salvador Allende. Chile aún no se ha repuesto de las heridas que dejó una dictadura brutal, a pesar de que en la actualidad haya un presidente de izquierdas como Gabriel Boric. La chilena fue una de las dictaduras más duraderas del cono sur americano, asentada sobre la represión y miles de muertos. Entre ellos está el presidente, Salvador Allende, que defendió fusil en mano el Palacio de la Moneda tras pronunciar su famoso discurso sobre las «alamedas de la libertad» en 1973. Lo cierto es que entre los ciudadanos de ese país aún existe confusión sobre unos hechos tras los que, sin duda, estaban los EEUU y la CIA azuzando a los traidores.


El Estado reconoce oficialmente 40.000 víctimas de ejecuciones sumarísimas, torturas y desaparecidos. Y eso es lo que reconoce, imagínense lo que habrá por debajo. No podemos olvidar a un dictador Augusto Pinochet que hasta los últimos años hizo alarde de una cobardía suprema para evitar la cárcel (fue detenido en Londres gracias al juez Garzón sin apenas consecuencias), falleciendo en 2006 sin condenas sobre él. Pero poco a poco la Justicia va poniendo a cada uno en su sitio, aunque tenga que pasar medio siglo. En agosto de este año el Tribunal Supremo condenaba a siete militares ya jubilados del secuestro, tortura y homicidio del cantautor Víctor Jara en el Estadio Chile, que hoy lleva su nombre. A finales de agosto se suicidaba un exmilitar condenado a 25 años por esos crímenes. Otros dos se han fugado de la justicia. Víctor Jara cantaba aquello de que tenemos ‘Derecho a vivir en Paz’. Esa fue su falta, por la que recibió mutilación, balazos y fue arrojado en la calle por quienes ahora huyen como ratas.

martes, 26 de septiembre de 2023

¡Grandi, Cruz, mu grandi!

 ¡Grandi, Cruz, mu grandi!

Con Cruz Díaz se va un grande la cultura extremeña y uno de los últimos escritores en castúo


Tan discretamente como vivió se nos fue la semana pasada Cruz Díaz Marcos, uno de los pequeños gigantes de la poesía en extremeño. Si ya de por sí escribir poesía es en la actualidad minoritario, hacerlo en castúo es una osadía al alcance solo de unos pocos románticos. Me ha dolido especialmente porque conozco su amor por las hablas extremeñas, en concreto de la de Garrovillas de Alconétar, localidad en la que impartió conferencias y tocó el acordeón con esa destreza que solo él tenía. Este gran escritor y miembro de la Coral Cauriense tenía en sangre lo extremeño, siempre desde un punto de vista inclusivo e integrador. Viajó por toda la geografía regional ensalzando lo nuestro, recitando sus poemas y dejando su música en casas de cultura y colegios.

Natural de Casillas de Coria y funcionario del Ayuntamiento de Pescueza, los inicios de su carrera poética están muy vinculados a El Periódico Extremadura, donde publicó sus primeros textos. También en La Crónica de Coria colaboró mensualmente y con una gran acogida entre los lectores. Sus trabajos aparecen en innumerables antologías de la poesía extremeña y sus libros tienen siempre un poso de ternura, amor a la tierra y exaltación sensorial, en especial Los instantes vividos, cuya lectura es más que recomendable. Debería ser obligatoria para los estudiantes extremeños.


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Ya cada vez quedan menos seres humanos como Cruz, tan transparentes, a los que se le podía ver la bondad de su alma con solo mirarlo a los ojos. La defensa del castúo sobrevive en pequeños colectivos como el Órgano de Seguimiento y Coordinación del Extremeño y su Cultura, pero queda más como una añoranza utópica que como una reivindicación política real. Con Cruz se va un grande de la cultura extremeña en todas sus manifestaciones y un buen escritor en el machadiano sentido de la palabra. ¡Grandi, Cruz, mu grandi!

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martes, 19 de septiembre de 2023

Un misterio, dos caras distintas

 Un misterio, dos caras distintas

Mientras que en el congreso mexicano se presentaban unas momias falsas como presuntos cadáveres de extraterrestres, la NASA admitía la realidad ovni en su esperado informe

La semana pasada, con apenas un día de diferencia entre ambas comparecencias públicas, uno de los misterios clave del ser humano mostró sus dos caras contrapuestas. Me refiero al enigma de los ovnis, que ahora se empeñan los más puristas en llamar UAPs.  

Por un lado, nada menos que en el congreso de México, se presentaban con todos los honores unos presuntos cadáveres de extraterrestres que no eran más que una pantomima de momias falsas. Solo la solemnidad del lugar daba una leve pátina de credibilidad al empeño de un investigador local, Jaime Maussan, en darnos gato por liebre, como ya trató hace años con otra momia. 

Por otro lado, en el cuartel general de la NASA en Washington DC, se presentaban los datos y evidencias recabadas sobre este fenómeno que, desde hace décadas, por no decir desde los albores del ser humano, nos sigue sorprendiendo a todos. En la actualidad, los ovnis constituyen un problema aeronáutico y de seguridad que afecta a todos los países de este planeta. La gran novedad es que por fin la NASA admite en rueda de prensa la realidad de los avistamientos. Literalmente, el informe presentado reconoce que el fenómeno UAP «es uno de los mayores misterios del planeta», aunque no señala la hipótesis extraterrestre como la única explicación, aunque no la descarta.

Quiero recordar que este misterio, en Extremadura, tiene un especial ejemplo en el caso del extraterrestre de la base de Talavera la Real. La madrugada del 12 de noviembre de 1976, tres soldados descargaron sus armas contra un ser verdoso de tres metros que levitaba. El principal testigo del caso, el pacense José Manuel Trejo, aún sigue arrastrando las consecuencias del encuentro. El enigma continúa, pero no es ninguna broma, se lo aseguro.

lunes, 11 de septiembre de 2023

Aplausos al cielo

El 8-S me acordé de los muchísimos trabajadores que a lo largo de un siglo han pasado por El Periódico Extremadura, muchos de ellos con una labor discreta, prudente y callada



He asistido a lo largo de estos 32 años de ejercicio profesional a muchos Días de Extremadura. Claro está, nunca con tanta emoción ni orgullo como en este último. Quisiera resaltar que no había escuchado tantos aplausos improvisados a los reconocidos con los galardones del 8-S. En las gradas del Teatro Romano de Mérida se aplaudió a rabiar y se hizo de corazón, especialmente cuando salía en la pantalla alguna imagen de El Periódico Extremadura o se le citaba. No era una clap orquestada artificialmente la que daba palmas. Ni siquiera los aplausos correspondían solo a los trabajadores que nos habíamos desplazado allí. El hemiciclo lo hacía por completo, con fuerza, agradecimiento, sinceridad y orientaba sus manos hacia donde estábamos los curritos, algunos por cierto, trabajando in situ. En esos momentos me acordé de los muchísimos trabajadores que a lo largo de un siglo han pasado por la casa, aportando, cada uno en su momento, el esfuerzo para llegar a estos cien años que no son meta, sino solo un hito en una carrera que apunta más lejos. Ojalá esos aplausos se hayan oído en el cielo donde ahora tantos profesionales de la casa descansan del trajín informativo.

Eso sí, si hubiera habido un ‘aplausómetro’, la palma se la hubiera llevado la Unidad de Oncohematología del Materno de Badajoz. Entre el público no solo había padres de niños que han superado la enfermedad, sino también aquellos que no pudieron hacerlo. Fíjense qué nivel de agradecimiento. El pasado viernes sentimos el calor de toda una región. Después vendrá el día a día. Los medios de comunicación debemos ser «incómodos», como dijo la presidenta María Guardiola y seguiremos siendo molestos para el poder como el tábano de Sócrates y criticados como él. Aún así, ahora sabemos que el esfuerzo merece la pena con creces.

martes, 5 de septiembre de 2023

Gala, en la tarde infinita




Gala, estoy persuadido de que nos ves por un diminuto pliegue del espacio-tiempo. Y que con tu eterna curiosidad felina contemplas a los viandantes de la calle Oaxaca ajenos al tráfago, a las urracas graznando mientras construyen sus nidos y cómo el último sol del atardecer parece que incendia las ventanas de los edificios. Ahora, Gala, estás en la tarde eterna, en la que el sol no se llega a poner nunca. Sospecho que echas de menos a tu inseparable y molesto Dalí, robándote el pienso del cuenco mientras huye veloz hacia la cocina con una sonrisa mezcla de delectación y pillería. Sí, Gala, tú nos ves desde un aleph borgiano, en el otro lado de este plano de la existencia. Desde allí contemplas el podio desde el que señoreabas el barrio y veías a los niños señalándote camino de la escuela gritando: «¡Mira, mamá, la terraza de los gatos!».

Siento que nos espías tendiendo la ropa allí donde en tu vida terrenal te pasaste los días dormitando y escudriñando horizontes. Como ves, Ana me sigue riñendo por no saber poner las pinzas en el pliegue en el que no deja marca. Dalí te busca con la mirada y no comprende tu ausencia en el rascador, al que no se atreve a subir. Allí está la pelota de los moños que has conservado durante 12 años en los que nunca bufaste a nadie. Ay, Gala, me dijeron que los gatos eran seres psicopompos. Es verdad. Has guiado nuestras almas sobre caminos de comprensión infinita al mundo animal, sobre el respeto a la vida, por pequeña que sea. Tú me has inspirado mucho más que textos literarios o periodísticos. Me has enseñado que es posible vivir en máxima armonía con el mundo, solo contemplando las flores, las nubes que se nos escapan, los ciclos de la tierra, en definitiva, las cosas que verdaderamente tienen importancia. 

martes, 22 de agosto de 2023

Pechos al aire

 Pechos al aire

Hay que normalizar los pechos a ojos vista e incluso liberarlos del martirio de los sujetadores


Hace escasas fechas, al abrir la puerta de mi ascensor, me topé con una mujer joven con un seno al aire. En ese mismo momento su bebé se había destetado, dejando su busto al descubierto. Mi reacción fue de sonrisa cómplice y de buenos deseos para el pequeño. Todo fue normal y sencillo. Yo diría que hasta agradable. Sin embargo, últimamente eso de ir a pecho descubierto causa revuelo e incomodo. Bueno, lo de ‘últimamente’ no es cierto, porque la involución en la que vivimos nos hace percibir los senos a la vista (normalmente una parte muy hermosa del cuerpo) como una amenaza. Dan miedo y no lo entiendo. Quizá porque sea zona hipersexualizada.  


Al parecer todo empezó con un concierto de la cantante Rocío Saiz en Murcia, en el que se quedó desnuda de cintura para arriba interpretando el ‘Cómo yo te amo’ de Manuel Alejandro. Un policía se extralimitó y la detuvo en el escenario en un sindios propio de una película de Berlanga. Le ha seguido la estela Eva Amaral, de quien recuerdo sus vínculos con Cáceres, pues era sobrina de ‘El Nano’, personaje icónico de la ciudad. Con un cuarto de siglo de experiencia a sus espaldas, Amaral reivindica el cuerpo femenino en una imagen que me recuerda a La Libertad guiando al pueblo, el cuadro de Delacroix. Solo pide libertad para el cuerpo femenino, excesivamente encorsetado por la moda y los prejuicios. Deberíamos normalizar los pechos a ojos vista, e incluso liberarlos del martirio de los sujetadores, percibiéndose por encima de la ropa. ¿Por qué ese miedo al pezón nutricio? Nunca lo entenderé. Tenemos que dejar de etiquetarlo todo. Ni la que lleva el pecho desnudo incita al sexo, ni si fuera así sería malo en sí mismo. Ojalá pudiéramos normalizar el desnudo. Nos ahorraríamos muchas sesiones de psiquiatría. Ya lo dijo Rigoberta Bandini en aquella canción.

martes, 11 de julio de 2023

UAPs, antes llamados ovnis

 UAPs, antes llamados ovnis

Recuerdo la época dorada de la radio en la que las ‘Alertas Ovni’ congregaban a millones de personas mirando los cielos en las noches de verano

Uno se empieza a dar cuenta de que se vuelve viejo cuando palabras que creía eternas son sustituidas por otras, generalmente por horrendos anglicismos. Es el caso del acrónimo ‘ovni’, los traídos y llegados objetos voladores no identificados. Desde hace un año esta palabra ha empezado a ser sustituida por UAP, otro acrónimo, en este caso de ‘unidentified aerial phenomena’, que es como quiere la NASA que denominemos a cualquier acontecimiento en los cielos del que no sepamos su origen. Cambiar el nombre de las cosas no deja de ser una forma de irlas diluyendo en la niebla del tiempo.

En estos días de verano recuerdo con gran nostalgia aquellos periódicos de los años 70 en los que no era raro ver en sus portadas titulares sobre ‘platillos volantes’, con fotos que eran auténticos manchurrones. Y sobre todo, recuerdo la dorada época de la radio en la que programas como ‘Medianoche’ (SER) de Antonio José Alés, movilizaban a millones de personas en las llamadas ‘Alertas Ovni’. Los Barruecos se llenaban de ávidos cazadores de ovnis, quienes durante una noche entera escudriñaban los cielos y reportaban las luces que veían, en algunos casos sin explicación. En la actualidad, el programa de radio ‘El último peldaño’ (Onda Regional de Murcia) es el que ha recogido el testigo y sigue convocando en todo el país a mirar el firmamento, en este caso el próximo viernes 21 de julio a partir de las diez de la noche y hasta entrada la madrugada del 22. Extremadura ha sido un espacio bastante frecuentado por los no identificados. Basta recordar casos como el humanoide de la base de Talavera la Real, los muchos habidos la comarca de Las Hurdes, o aquel «fuego que cayó del cielo» en Torrejoncillo, amén de otros muchos. Estos días de descanso veraniego propongo mirar al cielo y hacerse preguntas como la si estamos solos en el Universo. Personalmente, creo que no, por una simple cuestión de probabilidad.

martes, 4 de julio de 2023

Cáceres, nostalgia de playa

 En estos días de calor sahariano la ciudad se sumerge en una nostalgia playera en sus piscinas


Cáceres tiene una nostalgia de playa que se pone de manifiesto en estos días de calor sahariano. No sé si es nostalgia, ansia o necesidad. Lo cierto es que nuestras piscinas públicas se llenan a rebosar de usuarios, de forma que parece los bañistas estamos como piojos en costura. Lo he podido comprobar este fin de semana en la del Parque del Príncipe. El aforo es de 600 usuarios y el ‘cuentapersonas’ marcaba casi 500. No se pueden ustedes imaginar qué marabunta humana era aquello. Menos mal que no todas estaban a la vez en el agua, porque aquello era de locura sin que soplara una brizna de brisa.

Lo cierto es que en estas piscinas populares que tanto me gustan no falta medio Cimov bañándose, que también merece la soldadesca rebajar temperatura y templar hormonas. A ellos se unen familias enteras que echan el día tostándose al sol con los niños tirándose en bomba al agua. Y qué sería un día de piscina sin esos chiquillos que dicen «¡Mírame mamá, ahora sin manguitos!»… Y te pegan una salpicadura que te llena los ojos de cloro…

Ay, es que el relax es complicado cuando el agua de tanta gente y protección solar coge como un puntillo aceitoso, grumoso, que parece que en vez de bañarte estás sumergiéndote en una especie de sopa calentorra que se te pega a la piel y no te la despegas en todo el día.

Luego está el episodio de dónde poner la toalla, porque desde primera hora las zonas de césped están copadas. Al final te tumbas en una zona apartada en la que se te clavan los peñascos o te comen las hormigas… Es igual, estás al menos a un par de grados por debajo de cómo estarías en casa. Luego piensas que Portugal o Huelva están a unas horas de coche. Y empiezas a soñar con que las vacaciones están a la vuelta de la esquina.

martes, 27 de junio de 2023

Remontadas empresariales

Este jueves 29 de junio celebraremos la 28 edición de los Premios Empresario Extremeño del Año, y por añadidura nuestro centenario, en una ceremonia-espectáculo en el Castillo de la Arguijuela. Cuando pienso en el ganador del máximo galardón, Luis García-Torremocha, se me viene a la cabeza un término deportivo, pero perfectamente aplicable al mundo de los negocios: remontada. Tras un incendio en su factoría de reciclado de componentes electrónicos, no solo consigue volverla a poner en marcha en tiempo récord, sino que además la dota de las últimas tecnologías. Si pensamos, por ejemplo, en Bombones Valcorchero, otro ganador, también el término es apropiado. Sus fundadores estaban en edad de jubilación, en plena pandemia, con un producto bueno, pero no actualizado. Su hija decide ponerse al frente de la empresa, renovar por completo la gama y abrir nuevos mercados.


Si pienso en el doctor Florencio Monje Gil sucede tres cuartos de lo mismo: profesor en la facultad, clínica propia, escritor… No necesita más complicaciones y diseña un videojuego para enseñar sus técnicas a doctores de todo el mundo a través del móvil. De Manuel García Barra qué decir… Su vida es una remontada constante a través de distintos contratiempos, con un incendio incluido. O Cambio Energético, que empezó en un sector donde no había tradición y se convirtieron en líderes nacionales. Remontada: Superarse ante la adversidad hasta darle la vuelta a la tortilla. Ése es el espíritu que nos debe mover cada día. Remontadas extremeñas las hay históricas: la del Liverpool contra el AC Milán, en la Final de la UEFA Champions League de 2005. Rafa Benítez algo dijo a sus jugadores que les motivó a dar la vuelta al resultado de forma épica. Es lo que estamos logrando nosotros día a día en nuestra edición digital. Remontada. Sí, ese es nuestro espíritu desde hace cien años.

martes, 13 de junio de 2023

Las desgracias de 'El Millonario'

Un ‘sintecho’ de paso por Cáceres me refiere un periplo vital increíble de subida y bajada a los infiernos

Por las calles de nuestras ciudades deambulan historias que merecen, al menos, ser escuchadas y que te dejan siempre la sombra de la duda sobre su certidumbre. Es lo que me pasó el sábado, en la plaza Mayor de Cáceres, cuando un ‘sintecho’ se me acercó para pedirme un euro. Hasta ahí nada que no se salga de lo habitual. Sin embargo, el hombre comenzó a contarme su periplo vital, una existencia marcada por la desgracia que le había llevado a pedir por las calles. La limosna iba destinada, según su relato, a comprarse un capote. Dijo llamarse Jorge ‘El Millonario’ y que era hermano de Roberto Antolín ‘El Millonario’, nombre artístico del novillero Óscar Roberto Yangüez González. Con la adquisición de esa herramienta taurina quería triunfar en un difícil mundo donde su hermano tuvo relativo éxito. Repito que la veracidad del relato es muy compleja de comprobar, aunque bien es cierto que era coherente y sólido.

Tuvo una vida complicada en la que el consumo de drogas lo había arrastrado hasta los estratos más bajos de la realidad. Incluso llega a referir cómo fue a casa del actor porno Nacho Vidal a realizar el rito del ‘sapo bufo’, que costó la vida a uno de sus practicantes. Habló de lo que había pagado por la experiencia y describió el chalé del realizador de películas para adultos, que fue exonerado de toda culpa en aquel luctuoso suceso. ‘El Millonario’ llevaba todas sus pertenencias en una bolsa y me pidió que le indicase dónde estaba la estación de autobuses, porque le habían dicho que allí se podía dormir. Su padre, fallecido recientemente, era poseedor de miles de olivos y vides. En su testamento había dejado establecido que su hijo se casaba perdería todo derecho a la herencia. Decía que quería tomar un bus hacía Ciudad Real. ¿Verdad o fabulación? ¿Veleidad de un ‘sintecho’ o triste realidad? Nunca lo sabremos. Sin embargo, ‘El millonario’ vaga de ciudad en ciudad en busca de un sueño imposible. Y pasó por Cáceres.

martes, 6 de junio de 2023

Vuelva usted mañana... digital

Hace algo más de un mes realicé ante la administración un trámite que habitualmente hago de forma presencial. Los amables funcionarios locales que me suelen atender me habían recomendado hacerlo por internet. Me explican que las competencias las tiene asumidas ya el Estado y que en la comunidad autónoma ya solo se realiza el examen formal de las solicitudes. Añaden que se evitan desplazamientos y colas. Me convencen.

Acabo dándome de alta en el sistema de firma digital, que no es moco de pavo. Pago las tasas correspondientes. En eso nunca hay problemas y todo está clarísimo. Cuando entro en la web del ministerio es un galimatías del quince. Hay hasta unas instrucciones en PDF que son más largas que un día sin pan. Me tiro toda la mañana haciendo los trámites. Al final recibo un email automático diciendo que todo está correcto. Pero cuando entro en el expediente on line me aparece un mensaje inescrutable. Escribo a un correo del ministerio y me derivan de un departamento a otro. Al final recibo un mensaje en el que se me ruega con cierto tonillo sarcástico «que la próxima solicitud siga las indicaciones», ya que había indexado un pdf donde no correspondía y el expediente estaba por revisar. ¿No es normal que no sepa hacer un trabajo que no es el mío? ¿Qué hacen entonces los sin duda eficientes funcionarios?

Recibo otros correos electrónicos que no entiendo. Me han dado de alta en unas plataformas de nombres extrañísimos. Al final me indican que escriba al organismo regional para me lo aclaren todo, con quienes hacía el trámite presencial. Vuelta a la casilla de salida. Me explican que ahora la administración tiene 6 meses para resolver el expediente. Esta es una nueva versión del ‘vuelva usted mañana’ que ya describiera Larra en el siglo XIX. No dudo de la diligencia de los trabajadores públicos, pero esto de internet para todo y para todos se está convirtiendo en un problema morrocotudo. 

martes, 30 de mayo de 2023

Racistas... o algo peor

 Racistas… o algo peor

La violencia -el gran problema subyacente- se está enseñando a los niños como solución ante la adversidad

Los insultos al jugador del Real Madrid Vinicius se han convertido en un asunto de estado, con repercusiones internacionales. Quizá llego tarde al debate, pero creo que es una pena que tenga que ser el fútbol el que nos coloque ante un espejo en el que no nos gusta reconocernos. Hace años fui a un partido de escasa relevancia. No era un derbi, no se jugaban nada los equipos. Sin embargo, puede escuchar a honrados padres de familia, trabajadores intachables y prohombres de la patria volcar todas sus frustraciones vitales en forma de gritos y palabras malsonantes a los que vestían el calzón corto en el campo. Al día siguiente seguro que volvían a sus afanes y labores como ciudadanos ejemplares... Sí, al día siguiente... Durante los 90 minutos del encuentro son verdaderos energúmenos. Sí, claro está, no todos, pero subsumidos en la masa se vertían los peores sentimientos humanos. Ah, la masa, ahí está el secreto. A ‘la peña’ se le va la olla. Pero ‘la peña’ somos todos y cada uno de nosotros.


Esos mismos padres de familia son los que cuando sus hijos e hijas juegan en categorías infantiles los jalean y les recriminan a gritos que no han empleado la fuerza necesaria ante el adversario o que el resultado no ha colmado las expectativas que tenían depositadas en ellos. La violencia –el gran problema que subyace en todo eso- se está enseñando desde muy pequeños a los niños como forma de solución de cualquier adversidad. Es un problema generalizado. No se trata de un señor o señora que en la grada haya vociferado algo inapropiado. Seamos sinceros: no somos racistas, somos algo peor. Por supuesto, me sumo a la condena de estos comportamientos inclasificables con Vinicius y con cualquier jugador en los terrenos de juego. Son racistas sin paliativos, pero también hay microrracismos en nuestro día a día, con vecinos y ciudadanos a los que prejuzgamos sin piedad. También eso tenemos que hacérnoslo mirar.


lunes, 22 de mayo de 2023

Evocación de Pepe None y la feria

 Los fastos del Centenario de El Periódico Extremadura nos llevan a recuperar desde hoy la caseta del diario en la Feria de Cáceres después de un paréntesis de décadas. De hecho, en la memoria tengo el recuerdo difuminado por la lluvia de los días de Pepe None, un artista emeritense que dejó un gran sabor de boca a cuantos le vieron actuar en nuestra caseta durante cinco años. Yo entonces era un recién llegado al diario. Fue gracias a estas actuaciones con sombreros imposibles y desproporcionados las que propiciaron a él y su orquesta Cristal fama por toda la región a lo largo de tres décadas. Incluso llegó a hacer giras por el país.


Pepe None, auténtico hombre-espectáculo, debía su nombre artístico a que era el distribuidor de los productos Danone. Empezó con parodias que adobaba con rumbas y pasodobles. Después se añadieron más miembros a su orquesta, vinieron las ferias con El Periódico Extremadura, y su paso por radios y televisiones de la región como presentador. Caracterizado por un mostacho enorme y una querencia a los focos única, se transformaba en escena y era muy difícil no sonreír ante su desparpajo. Sus actuaciones en la Feria de Cáceres están en la memoria de todos, aunque durante una de ellas Fernando Esteso se subiera al escenario en no muy buenas condiciones y le rompiera uno de sus sombreros, cosa que generó un momento tenso entre artistas. Pepe None (que por una errata apareció una vez en el periódico como «Pene None y los miembros de su orquesta») se retiró en 2009, cansado de tanta carretera y manta. Mi más grande admiración por estos genios de la escena, absolutamente autodidactas, que nos pusieron una sonrisa con su talento. Desde hoy vuelve el talento a la Caseta del Centenario del Periódico Extremadura. Vaya y disfruten. No estará Pepe None, pero se lo pasarán igual de bien con la programación, ajustada a los gustos actuales. Feliz Feria de San Fernando a todos.  

martes, 16 de mayo de 2023

La voz de Lana Tryhub

 La voz de Lana Tryhub

«Nos pueden arrebatar muchas cosas, pero no la elección de nuestra actitud personal ante las adversidades», dijo la refugiada ucraniana
En la pasada entrega del Premio Europeo Carlos V se vivió un momento de pellizco emocional. Durante la entrega del galardón que concede la Fundación Academia Europea e Iberoamericana de Yuste hubo una intervención especial, la de Lana Tryhub, una refugiada ucraniana en Extremadura que subió al estrado a sacudirnos nuestras conciencias con sus palabras. A sus 34 años ha tenido en muy poco tiempo que cambiar de país, aprender un idioma de forma vertiginosa y buscarse la vida como decimos aquí. Música y subdirectora de un centro cultural en su país y madre de dos hijas, una madrugada les despertó el sonido de un avión y supieron que la guerra había estallado. Solo pensar que eso puede suceder a cualquiera de nosotros me da escalofríos y no sé cómo reaccionaría. Ella lo ha hecho con valor y coraje. Las atentas miradas del premiado, el secretario general de la ONU, António Guterres, y del propio monarca Felipe VI, revelan lo conmovedor de lo que Lana contaba desde Cuacos de Yuste al mundo. La jornada se convirtió en un alegato contra la guerra, esa gran estupidez que ciega a los mandatarios y los vuelve codiciosos de territorios y recursos naturales sin importarles un pimiento las vidas humanas.
Lana, tras un duro periplo vital en el exilio, conoció a un productor musical y volvió a tener esperanzas gracias a la música. Comprendió que en un país extranjero también se puede hacer lo que se ama. Los azares del destino la llevaron a Badajoz. Allí conoció a Pedro Monthy, presidente de Músicos Sin Fronteras, y le ofreció la oportunidad de cantar con ellos y de realizarse como intérprete. Ahora estudia para homologar sus diplomas universitarios. «Nos pueden arrebatar muchas cosas, pero no la elección de nuestra actitud personal ante las adversidades», concluyó. Sin duda, la música la ha salvado de un destino incierto. Sin ella, ya lo dijo Nietzsche, la vida sería un error.

martes, 18 de abril de 2023

Carlos Tena, adiós a un heterodoxo

 Carlos Tena, adiós a un heterodoxo

El periodista musical sostenía que si Luis Pastor o Pablo Guerrero hubieran nacido en EEUU, ahora serían más valorados, tanto como Leonard Cohen

La semana pasada nos dejó Carlos Tena, un periodista y presentador que marcó mi infancia y que, de alguna manera, es responsable de mi vocación por comunicar. Sus programas musicales en una Televisión Española que daba sus primeros pasos y que suplía la ausencia de medios con talentazos como el suyo, fueron formidables. Mis primeras experiencias como televidente vinieron en blanco y negro, de la mano de su Popgrama (1977-1980), que despertó mi interés por la música y la necesidad de aprender a tocar un instrumento.

Tena fue militante del Partido Comunista, pero lo suyo no era una pose. Su adscripción política la vivió hasta las últimas consecuencias, que fueron muchas en su vida profesional. Es preciso recordar que en 2003 se fue de España para vivir en La Habana (Cuba), en plena coherencia con su ideario vital. Gracias a Tena, con su característico pelo lacio y gafas de pasta, tomé contacto temprano con creadores como Mike Oldfield, Queen, AC/DC, Patti Smith o Bob Marley. Sumido en esta labor vivió uno de los episodios más duros de su vida, cuando en el programa La caja de ritmos (1983) incluyó un videoclip de un grupo de rock radical vasco denominado Las Vulpes (Las zorras). La letra de una de sus canciones, claramente inadecuada para el horario y el bloque de programas infantil-juvenil en el que se emitió, provocó todo un terremoto político. Él quedó tocado por ese episodio, aún así continuó haciendo programazos como A uan ba buluba balam bambú (1985-1986) que lo convirtieron de facto en uno de los estandartes de la llamada Movida.

Una vez leí un artículo de Tena que decía que si Pablo Guerrero o Luis Pastor hubieran nació en EEUU en vez de Extremadura ahora serían considerados como los Leonard Cohen españoles. El periodista recibió en 2016 uno de los Pop Eye, que se entregaron en el Festival Pop Art, en Cáceres. Descanse en paz.

martes, 4 de abril de 2023

El duro oficio de cantar

El concierto el pasado Sábado de Pasión en la Sala Boogaloo de Cáceres me recordó una vez más lo inmensamente duro del oficio de cantar. La cacereña Paula Rubio y el gaditano Luis G. Lucas hicieron gala de un derroche de talento y belleza musical, con buen sonido, muchas ganas y la ilusión desmedida que caracteriza esas edades. Aunque el espectáculo se redujo a un consumo casi familiar, fue de esas joyas que a veces puede uno encontrarse en una ciudad (y un país) donde el tiempo de los cantautores pasó y solo se presta atención a lo desmesurado y a los macroconciertos. A veces lo pequeño y lo sencillo llega más dentro y tiene más valor. Éste fue el caso.


Paula Rubio es una cantautora local con ideas y hambre de escenario. La vimos en la plaza Mayor el pasado verano y demostró que el gran formato no le queda grande. Tiene la pureza de quien no está aún contaminado por los riesgos laborales del oficio: managers, representantes, industria discográfica, organismos oficiales, gestores culturales… Y en esa candidez reside el inmenso valor de su trabajo. Canciones trabajadas y hechas con las tripas, que llegan al espectador.


 La otra parte del binomio, Luis G. Lucas atesora mucho oficio y experiencia. Gran parte de sus temas hablan de perseguir sueños en el mundo de la música por encima de prejuicios sociales e imposiciones comerciales. Tiene dentro ese duendecillo del genio gaditano y sobre todo mucha gracia y saber estar en el escenario. Ojalá esta unión musical y vivencial con Paula tenga más recorrido y muy pronto tengamos nuevos trabajos de ambos dos. Eso no está en sus manos. A veces para que el talento se revele al gran público tienen que suceder extrañas serendipias y casualidades ajenas a los creadores. Ellos tienen posibilidades, que los vientos los lleven pronto a Ítaca.

martes, 7 de marzo de 2023

'Orden', la delectación literaria



En este mundo de consumo urgente de textos y mensajes, donde la delectación en la lectura se ha olvidado casi por completo, acaba de aparecer una pequeña sorpresa, una especie de aleph literario, desde donde disfrutar de muchos géneros en un solo libro. Esta joya editada por la Editora Regional se titula ‘Orden’ y me ha hecho recobrar la fe por la literatura en ese mundo de apóstatas de los libros. Es último trabajo de Victoria Pelayo Rapado (Zamora, 1960).

Aunque pueda parecerlo, no es una obra menor. El relato corto es un formato muy denostado. ‘Orden’ no es un libro de fácil lectura, aviso, pero eso lo convierte en algo más valioso. Y esa necesidad que tiene de ser consumida despacio, con papel y bolígrafo al lado, la convierten aún en un tesoro. Efectivamente, el orden es el nexo de unión de las historias, donde un dato, en principio irrelevante es el desencadenante de que los personajes se vean envueltos en una desventura.

‘Orden’ engancha desde la primera narración. Quizá porque la primera historia se desarrolla en Cáceres y hay un Juanjo, pérfido, que abandona a su novia cuando ella más lo necesita, tras quedar mutilada en un accidente. Por cierto, que y hay una escena en el conocido bar Charlotte de la capital. También me interesó porque en el segundo de ellos, ‘Testigo’, la trama se desarrolla en el mundo del periodismo, con un personaje que se apellida Ventura. El relato estrella, a mi gusto, es ‘Tu orden, mi desorden’, donde se hace más evidente la importancia de la jerarquía con la que colocamos nuestros enseres.

Victoria Pelayo tiene una gran habilidad discursiva. Alterna el monólogo interior con el autor omnisciente con maestría y sabe dosificar la información de forma que los relatos tienen mucho de novela policíaca. Todos ellos son como pequeñas novelas concentradas. Si quieren volver a sentir ese placer antiguo de la lectura, abran las páginas de ‘Orden’. Son exigentes y a la vez gratificantes. Pruébenlo. No se arrepentirán. No hay Tiktok que la supere, aunque sea de gatitos.

martes, 28 de febrero de 2023

Las anacrusas de Carlos Goñi

 Las anacrusas de Carlos Goñi

Desconocemos las intrahistorias que convierten a artistas y grupos como Revólver en seres de otro mundo



Las notas anacrusas son unas notas sin acento que anteceden al primer tiempo fuerte de una canción. Y este dato, que para el escuchante tiene poca importancia, sí la tiene para un músico subido a un escenario. Después de más de treinta años sobre las tablas, Carlos Goñi, cabeza visible de Revólver, sigue esmerándose hasta en estos mínimos detalles. O no tan mínimos. Agradeció a su batería Miguel Giner ser el primero de toda la larga historia del grupo que interpretara a la perfección esa parte del tempo. En varias ocasiones elevaba sus baquetas al cielo al final de los temas. En los músicos nada es al azar y menos en un grupo como Revólver. Ese día había fallecido su suegro y el bolo de Cáceres le impedía estar con su pareja en ese trance difícil. Los espectadores desconocemos muchas intrahistorias que convierten a los artistas en seres de otro mundo. Los integrantes de Revólver lo son. De otra manera no habría forma de explicar cómo, a pesar de décadas y azares, la voz de Carlos Goñi está intacta y aguanta dos horas largas de escenario. Ni tampoco cómo remonta un show que comenzó con problemas de sonido y en el que, al menos en el gallinero, la acústica dejó que desear. Sin embargo, Revólver consiguió poner a bailar al público en muchos temas, encandilar con las propuestas de su nuevo disco Adictos a la Euforia y hacer olvidar pesares en un espectáculo que se hizo corto. Pocas bandas de rock&roll siguen vivas y coleando después de décadas, y menos logrando estar en los primeros puestos del ahora complejísimo mundo de la música en internet, donde mandan algoritmos y descargas. Debe ser alguien muy exigente Carlos Goñi, especialmente consigo mismo, cuando vuelve a repetir un tema en directo porque no ha ido a tempo, o cuando le van a cambiar de guitarra en escena y decide de repente cantar el tema a capela. Insisto, Revólver, tras un largo y tortuoso camino, no ha cambiado, y si lo ha hecho ha sido a mejor. En el Gran Teatro muchos fuimos los testigos de ese milagro.

miércoles, 22 de febrero de 2023

100 números de 'Tajo-Salor'



En estos 20 años el sentimiento de pertenencia a la comarca se ha vuelto más hondo gracias al periódico gratuito de Prensa Ibérica

El Periódico de Tajo-Salor distribuye hoy su número 100. En este año del centenario de El Periódico Extremadura también hay sus otros aniversarios en la casa, quizá más pequeños, pero no menos importantes. 

El ‘Tajo-Salor’, como se le conoce entre los lectores, lleva más de veinte años llevando la actualidad a los vecinos de la comarca en una de las más exitosas aventuras de la prensa gratuita extremeña. Allí donde están sus puntos de reparto hay un peregrinar de lectores ávidos de recogerlo en cuanto se depositan. Siempre he escuchado aquello de que «solo el periodismo salvará al periodismo» y aunque el ‘Tajo-Salor’ no es ningún ejemplo de exclusivas o primicias, ha cumplido con creces su misión en estas dos décadas: informar al ciudadano de lo que tiene más cerca y de lo que más le afecta en su día a día.

También hay que agradecer la colaboración de todos los ayuntamientos que, en la medida de sus posibilidades, remiten la información para que la publicación esté mensualmente en manos de los lectores. No todos los consistorios tienen los mismos medios y ésta tiene que ser tratada a fondo por profesionales para cumplir los estándares de calidad que requiere. En estos 20 años el sentimiento de pertenencia a la mancomunidad se ha vuelto más profundo gracias a esta publicación y sus trabajos en favor de los ciudadanos han tenido cumplido reflejo en las páginas. 

martes, 14 de febrero de 2023

Los Goya en un país de porteras

Mientras sea ficción nos hacemos cruces, pero en la realidad todos practicamos el 'buylling', de una manera u otra


Me avergüenza vivir en un país en el que tras una excelente cosecha de trabajos galardonados con los Premios Goya, el principal comentario al día siguiente no sea el fantástico retrato de la Galicia profunda de As Bestas, ni la radiografía de las cárceles franquistas aguardando la amnistía de Modelo 77. No, lo que ocupaba minutos de programas de televisión era el aspecto físico de la actriz Berta Vázquez en esa hoguera de vanidades que es la alfombra roja. ¿Realmente este es el nivel? Estamos en un país de porteras y verduleros de vecindario, solo interesados en el comentario malicioso por vender algo. Y una vez más la mujer en el punto de mira por no cumplir determinados cánones. Lo siento, pero ver los ojos entristecidos de Berta me han recordado a los de los ejemplares de ganado en los concursos morfológicos de la Feria Agroganadera o de Zafra. Eran la viva imagen del dolor emocional ante los murmullos y reacciones adversas de su imagen personal mientras sonaban los flashes. Así veo la alfombra roja, un concurso de ganado en el que en vez de veterinarios hay fotógrafos y viperinos comentaristas del cuore.


Me preocupa doblemente porque una de las películas triunfantes es Cerdita, rodada en Extremadura, y que hace una cruda denuncia del acoso, también llamado bullying, quizá porque que pensamos que el anglicismo quita hierro al tema. Es decir, que mientras sea ficción nos hacemos cruces, pero en la realidad todos lo practicamos de una manera u otra. Sí, cotillear del aspecto exterior de una persona es una forma de señalar, arrinconar y vejar a un ser humano. Así es esta nuestra sociedad, hipócrita y como aquellos sepulcros blanqueados que decía Jesucristo. Otro de los casos comentados –en vez del alto nivel de nuestro cine- es el de la actriz Sara Sálamo que iba sin maquillar a la ceremonia. ¿Tiene eso importancia? Nadie ha entendido la denuncia de Sara. No estamos avanzando nada y me temo que seguiremos así mucho tiempo. 

jueves, 9 de febrero de 2023

El año del cometa verde

Julio Verne en su novela El Rayo Verde cuenta el periplo de un adolescente en busca de un raro fenómeno atmosférico. En determinadas latitudes el último rayo de sol perpendicular al mar se filtra a modo de prisma y, en vez de ser amarillo, se torna verde al mezclarse con el agua marina. Al final, después de una serie de fracasos el joven prefiere besar en ese instante irrepetible a la mujer que conoció en su viaje en vez de contemplar ese prodigio de apenas un segundo de duración. Me he acordado de esa novela estos días saliendo a buscar el cometa verde que ha surcado nuestros cielos.

El C/2022 E3 (ZTF) ha pasado a 42 millones de kilómetros. No tiene cola, pero sí emite una curiosa luz de color fosforescente. Solo pasa cada 50.000 años y me siento afortunado de haberlo podido contemplar. Auténticos expertos en este arte de la astrofotografía son Lorenzo Cordero, a la sazón fotógrafo de esta casa y el periodista Diego J. Casillas, quien con su magisterio me dio en Malpartida de Cáceres algunas nociones de fotografía nocturna. No quiero engañarles, no es fácil fotografiar un cometa. Hace falta equipo (cámara profesional, trípode, intervalómetro), aplicaciones para conocer la posición en el cielo de las estrellas y otras para encontrar la hiperfocal, algo así como la distancia perfecta donde todo está enfocado, incluido el infinito. También hacen falta conocimientos de velocidad, apertura de diafragma y sensibilidad. Aun así tuve que ir un par de noches al rodeo cacereño para conseguir una imagen digna. No obstante, vale la pena. Ser ‘cazador de cometas’ es alto totalmente sostenible, y te hace que te hagas las famosas preguntas vitales: Quiénes somos, de dónde venimos y a dónde vamos. También recordé aquella canción de Miguel Ríos titulada ‘El año del cometa’, cuando el Halley pasó cerca de la tierra: El año del cometa, mi vida solo es delirio y soledad. El mundo gira en un vértigo demencial.

martes, 31 de enero de 2023

Los ovnis extremeños del siglo XXI

Cuando comencé a leer periódicos, a finales de los setenta me fascinaban aquellas crónicas sobre ovnis que salpimentaban sus páginas. Avistamientos y encuentros con seres se otros mundos eran relatos habituales en las portadas de la prensa de un país que se abría a la democracia y la libertad. 

El doctor en Periodismo Pablo Villarrubia Mauso acaba de publicar un documentadísimo libro llamado Expedientes Ovni del Siglo XXI en el que, no solo hace una completa cronología de los sucesos de las dos últimas décadas, sino que vuelve a visitar a los testigos de los casos más espectaculares de todos los tiempos. Uno de ellos, al que dedica un capítulo entero, es el sucedido a dos kilómetros Higuera de la Serena en junio de 1987, en el paraje Cicaratón, cerca del huerto Moreno. Tres vecinos se vieron sorprendidos de madrugada por una luz que se les acercó repentinamente. En cuestión de segundos se encontraron frente a un objeto flotando de 15 metros de diámetros que emitía un zumbido. Decidieron apartarse de él pero se toparon con unos seres, aparentemente vinculados al artilugio. Tuvieron que agazaparse en los matorrales de la ribera de un riachuelo cercano y llegaron a escuchar los pasos de los ufonautas muy cerca. Si bien el avistamiento de ovnis (ahora llamados UAPs o fenómenos aéreos no identificados por Norteamérica) continúa, el de humanoides se ha reducido hasta el punto de ser meramente anecdótico. El doctor Villarrubia vuelve a hablar con los testigos treinta años después. El relato, tras tres décadas, se mantiene inalterable y la veracidad del mismo está fuera de dudas. Extremadura ha sido siempre un espacio especialmente querido por los no identificados. Otro gran caso español de avistamiento de un humanoide  fue en la base Aérea de Talavera (1976). Sobre él se dispararon ráfagas de metralletas. Nada, las balas no pudieron una vez más aclararnos este misterio. Si quieren saber más, el libro de Pablo Villarrubia merece una buena lectura a fondo.

martes, 24 de enero de 2023

Fitur y La Orgía Perpetua

En La Orgía Perpetua, Mario Vargas Llosa, analiza uno de esos libros que han marcado la historia de la literatura: Madame Bovary. En él, Gustave Flaubert marca los inicios de la novela moderna, con un texto que siempre me ha conmovido. El autor francés se encontraba en una permanente vorágine creativa (esa ‘orgía perpetua’) que está en los cimientos de esta obra maestra de la literatura. Pues creo que con la Feria Internacional del Turismo que acabó el domingo sucede algo parecido. Las instituciones extremeñas y los agentes del turismo regional están durante unos días auténticamente on fire promocional. Detrás del estand, las demostraciones de cocina en vivo hay un trabajo muy fértil que quizá no trasciende a los medios y que tiene lugar en el recinto: son los encuentros business to business y que este año han estado a rebosar. Hacía tiempo que no veía tanto entusiasmo y tantas ganas de hacer negocio. Aunque para entusiasmo el que le pone el director general de Turismo Francisco Martín, a cada presentación a la que acude como ponente, que es a casi todas. Pide aplausos, anima a los intervinientes, alaba el trabajo de todos… con un discurso encendido en el que la pasión prima. No voy a negar que a veces es un poco insistente con los datos y que se le va la vida en cualquier anuncio que hace. Pero si él no pone pasión ¿quién la va a poner? Suda y siente la camiseta como pocos. Eso a las alturas que estamos es casi un milagro. Otra cosa son las visitas reales. Todos los apoyos son necesarios y bienvenidos, pero a veces siento que son como fuegos de artificio. Esta última de Felipe VI y Letizia ha durado un par de minutos y creo que hay mucho paripé en ella. Al final todo se reduce a una foto con el discreto glamur de la realeza y un titular algo forzado. Finalmente, como siempre, el maratón de ruedas de prensa del estand se hace cada vez más cuesta arriba. Quizá sea la edad, pero asimilar tanta información en tan poco tiempo es realmente agotador. Sin embargo, el balance final vuelve a ser positivo.

martes, 17 de enero de 2023

30 años de versión original

 

Aún recuerdo a Paco Rebollo, con Tinti y Javier Remedios, en la sede el periódico de Camino Llano presentando los primeros números


El cine nos enseña que para abordar fielmente una trayectoria vital existen múltiples vías, desde el documental al biopic, pasando por el docudrama. Todas acertadas y válidas, según la pericia del director. Las tres décadas que acaba de cumplir la revista Versión Original son excusa de sobra para realizar este retrato sobre su director, Paco Rebollo, a la sazón profesor de Física y Química, filántropo, apasionado de la lectura y, por supuesto, del cine. Él es el culpable de revertir el siempre previsible panorama de una ciudad alejada de los lobis culturales como Cáceres, gracias a una publicación en papel especializada que, por su excelencia, aún resiste incólume los seductores envites del algoritmo de Google.

Recuerdo aquellas primeras entrevistas en la sede de Camino Llano de El Periódico Extremadura para presentar cada nuevo número. Rebollo ya vestía siempre de negro absoluto como ahora. No venía solo a la redacción. Se acompañaba del director de arte, Javier Remedios, quien imprimió a la publicación su personalísimo sello gráfico. La terna primigenia de la publicación se completa con Tinti Rebollo. Es la revista cultural más antigua de Extremadura, con más de 300 números, cada uno de ellos dedicado a un tema .

Está documentado el trabajo de expertos al frente de publicaciones cinematográficas durante más de tres décadas, como Elisenda Nadal (cuatro décadas dirigiendo la revista Fotogramas) y directores de festivales de cine con una importante trayectoria, como Olivier Barrot (20 años de director artístico del Festival de Cannes). Sin embargo, no existen precedentes nacionales ni internacionales sobre la dirección conjunta de dos proyectos vinculados al séptimo arte durante décadas, sin remuneración por esta doble labor, y con la satisfacción de haber conseguido destinar de 300.000 € a acciones humanitarias. Y en esto Paco Rebollo vuelve a ser un adelantado, un caso único en España. Felicidades por estas tres décadas de cine y cultura a todos los VO.

martes, 10 de enero de 2023

¿Cuál es nuestra estrella?


Pasaron los magos, que vinieron siguiendo una estrella, y se acabó la Navidad. A lo largo de nuestra existencia también se cruzan astros, luminarias que nos muestran el camino y que, de alguna forma nos azuzan hacia nuestro destino. A veces es una idea que encontramos en los libros y periódicos. En otras ocasiones es una persona la que se convierte en nuestro faro, en nuestra guía, porque vemos en ella la bondad y la honradez que tanto escasean en este mundo. Otras veces, como en el caso de la guerra en Ucrania, es un acontecimiento el que nos mete un derechazo en el hígado y nos sumerge de lleno en la realidad más cruda, despertando nuestros deseos de cambiarla.

Esas luces que atraviesan nuestras vidas no deben ser meteoritos. Su fugacidad depende del interés que mostremos por ellas. Nuestra mirada tiene que estar atenta y nuestros sentidos en guardia para que nos conduzcan al verdadero destino vital. Ayer recogí con pena el portal de Belén y me di cuenta de que ese es nuestro mejor destino, la luz auténtica de unos padres dando amor a su hijo. Hay que buscar a Jesús de Nazareth, que, al margen de lecturas religiosas, fue un personaje histórico que dejó el mensaje más importante, el del Amor. Los magos le dejaron sus ofrendas y, además, le veneraron, se entregaron a él como debemos hacer nosotros. Introduje con gran emoción las figuras en su caja, pero me prometí que, aunque físicamente no estuvieran presentes en el comedor de casa, su mensaje estaría en cada día de este nuevo año, tan difícil, que se nos presenta a todos. Comienza un periodo de búsqueda, una oportunidad para mejorar. Seamos como el cuarto rey mago, Artabán, que aparece en los Evangelios Apócrifos. Llevaba al Niño Jesús varias joyas para adorarle. Se perdió en el camino y tuvo que despojarse de ellas poco a poco. Aunque no encontró físicamente a Cristo, al desprenderse de lo superfluo fue el mago que mejor lo conoció.