martes, 18 de junio de 2013

Mañana, milagro



Mañana vuelve a repetirse un milagro que sucede todos los meses de junio desde hace 18 años. No me estoy refiriendo a ninguna licuefacción pública de la sangre de algún santo, sino de los Premios Empresario Extremeño del año que desde 1996 entrega EL PERIODICO. Tantos años ininterrumpidos de galardones, a pesar de muchas vicisitudes, es un hecho prodigioso, que sin duda justifica una investigación a cargo de Iker Jiménez . Pero quizás no haga falta. La famosa noche de las empresas extremeñas que pusimos en marcha hace casi dos décadas no es fruto de una casualidad venturosa. Los oficiantes del milagro son dos. Primero, todos los trabajadores del rotativo que, además de sus ya extensas labores diarias, dedican desde meses antes un poco más de tiempo y esfuerzo para que mañana todo vuelva a salir de lujo.
Los otros responsables --pueden adivinarlo-- son las empresas extremeñas, que siempre responden enviando sus candidaturas y colaborando en la publicación del suplemento Especial Empresas. A pesar de lo adverso de la coyuntura sigue el gran interés por participar, por 'estar en la pomada' del mundo de los negocios. Mañana culminan muchos esfuerzos, de trabajadores y de empresarios. Es justo por tanto reconocer que dando un poco más de nosotros mismos somos capaces de crear --y lo que es más difícil-- de mantener un acontecimiento que está considerado el 'termómetro' de la economía regional. Así que finalmente no se trata de un milagro, sino del resultado de una eficaz interacción común. Cosas como ésta nos animan en este paso del Rubicón de la crisis. Refrán: Tras la puerta del esfuerzo, se esconde la habitación de nuestro logro.