martes, 30 de marzo de 2010

El género neutro

El colectivo andaluz ´Colegas´, que agrupa a lesbianas, gays, transexuales y bisexuales ha animado recientemente a quienes no se sientan ni hombres ni mujeres a que se proclamen a los cuatro vientos del género neutro, como ha conseguido un ciudadan de Gran Bretaña.
¡Ah, qué recuerdos me trae eso del neutro! Recuerdo un profesor de latín con muy mala baba que a un compañero a todas luces bisexual le preguntaba con socarronería:
--A ver Pedrito , dime el neutro de eos probos mores ...
Y es que ahora es todo un lío. La cosa se ha complicado mucho con tantos géneros y tendencias. Y está muy bien. Pero me pierdo. Porque no es lo mismo ser homosexual que transexual y no todos los transexuales consideran que son intersexuales o transgéneros. ¡Uf, qué laberinto!
¿Y a qué cuarto de baño van los neutros o los transgéneros en una discoteca? La verdad es que todos están igual de sucios, pero habrá que inventar un cartelito específico. ¿Y cómo se le habla a un neutro? Porque habrá que adjudicarle un género en la conversación. ¿O será políticamente incorrecto? ¿Y los asexuales que se sienten como las amebas? ¿Tendrán otro cuarto de baño? ¿Y los heterosexuales? ¿Acabarán en peligro de extinción?
Los hindúes creen que los hermafroditas están más cerca de la divinidad y los consideran semidioses. A mí me parece que debería haber hasta cinco o seis géneros distintos y un solo cuarto de baño, que nos mezclemos todos de una vez, con nuestras diferentes formas de amar y ver la vida. Eso sí, antes, por favor, dadme un plano para orientarme. Refrán: Si quieres tirar una pared, apuntálala