martes, 25 de noviembre de 2014

La absurda fascinación por la aristocracia

No deja de sorprenderme la fascinación que sentimos por la aristocracia. Prueba de ello son las múltiples reacciones tras el fallecimiento de Cayetana Fitz-James Stuart y de Silva , XVIII duquesa de Alba y la persona con más sangre azul del mundo. Incluso se extendió el rumor --falso-- de que hasta la mismísima Reina de Inglaterra debía hacerle una reverencia si en algún momento coincidían. Es innegable el 'feeling' que tenía con el pueblo, especialmente con el sevillano, tan amigo de tradiciones atávicas y ancestrales y de que una octogenaria se ponga a bailar por bulerías en plena calle. Tampoco voy a obviar el grandísimo y cuidado patrimonio cultural, artístico y documental de la Casa de Alba, ni sus obras sociales. Pero no quiero que tanto oropel nos distraiga de que doña Cayetana era la absentista y la terrateniente que más dinero recibía en ayudas de Europa, un millón de euros al año, amén de establecer un sistema de ingeniería financiera entre sus empresas y sus fundaciones para minimizar los tributos al fisco. La Casa de Alba ha vivido siempre a costa de los jornaleros del campo. ¿Se repartirán ahora sus tierras entre los campesinos? 'La duquesa que se puso el mundo por montera', dicen los titulares. Con 3.200 millones de euros de patrimonio eso no tiene mérito. Todavía recuerdo la expropiación de las fincas Cabra Alta y Baja en Zahínos en 1990. Los comuneros recuperaron sus tierras tras doce años de litigios y un justiprecio que tuvo que salir de las arcas públicas, vaya, de nuestros bolsillos. Y es que doña Cayetana no tuvo nunca un pelo de tonta, aunque nos hiciera creer lo contrario con tanto baile y folclore.Refrán: La nobleza y los blasones, nada valen sin doblones.

martes, 18 de noviembre de 2014

Pasión por conocer nuestra historia

La semana pasada el Grupo de Estudios de Historia Contemporánea de Extremadura tuvo la generosidad de invitarme al congreso 'Extremadura en la II República'. Los asistentes habíamos sido abducidos por la incansable labor de 'agitación y propaganda' que realiza el profesor José Hinojosa . El programa fue amplísimo y el salón de actos de la biblioteca de Cáceres estuvo a tope prácticamente durante dos jornadas. Con la que está cayendo, un día de lluvia, de mercado medieval en Cáceres y jugando la Selección, lograr ese interés por una disciplina tan árida como puede ser la historia es todo un mérito extensible a todos y cada uno de los socios del Gehcex. Y el análisis de la II República en Extremadura se hizo con pasión por el conocimiento, pero sin sectarismos ni visiones sesgadas. La mayoría de los temas engancharon a los asistentes, como el conato de revuelta anarcosindicalista en Jarandilla de la Vera, la reivindicación del último ayuntamiento de Guadalupe, el paso de las misiones pedagógicas por los pueblos extremeños, los vaivenes de la banda de música de Fuente de Cantos, o cómo fue depurado el profesorado en el Instituto Nacional de Cáceres, entre otros. No todo está perdido. A pesar del alto grado de anestesia inyectado en la sociedad, todavía hay quienes se preocupan y ocupan por conocer mejor nuestra historia contemporánea. La siguiente cita, el año que viene, aborda la Transición Democrática. Les deseo lo mejor, porque esta gente es la que hace falta, la que pone pasión en todo al margen de reconocimientos y zarandajas. Esos son los verdaderamente imprescindibles. Refrán: Los libros son maestros que no riñen y amigos que no piden.

martes, 11 de noviembre de 2014

Recuerdos de un viaje a Galicia

Recuerdo mi primera gran experiencia turística por Galicia, con apenas 8 años y junto a mis padres, montado en un autobús en el que la guía comentaba megáfono en mano un paisaje verde y lleno de hórreos a los excursionistas. Eran otros tiempos --más grises en todos los sentidos-- en los que se visitaban únicamente iglesias y apenas pude chupar la cabeza de una gamba. Era en temporada baja y llovía mucho. Una de aquellas paradas del viaje fue en A Rúa, y aunque mi memoria de humo no es capaz de poner en pie aquella visita en concreto, sí me alegra saber que con el tiempo esta localidad orensana se ha vuelto más cercana a nuestras vidas tras su hermanamiento con Almendralejo. Cuando sales de la ciudad 'del Vino y la Concordia' encuentras una rotonda con la leyenda "A Rúa 565 kilómetros". Artífice de esta cercanía en el corazón a pesar de la lejanía física es su embajador y experiodista de esta casa Juan Francisco Sánchez , así como el alcalde de la localidad gallega, Avelino García , que la semana pasada visitó el Salón del Vino. Los tiempos han cambiado y ahora en vez de hórreos los atractivos son más lúdicos: la 'Baco Festa', la Fiesta del Codillo (que se hace con grelos, patatas y chorizo), el Magosto (parecida al Magosto de Carbajo con las castañas de protagonistas), o la Fiesta de la Empanada de Costrelas. Por supuesto, todo ello se celebra con unos vinos de Valdeorras seductores y acreditados. El turismo ya no es lo que era y ahora ya no vale cambiar 'sol por dinero'. Afortunadamente lo sabemos muy bien, tanto en Galicia como en Extremadura. Refrán: Viajamos para cambiar, no de lugar, sino de ideas.