martes, 20 de marzo de 2012

40 años de 'A cántaros'

Hay canciones que marcan una vida, que son un pedazo de historia hecha música y verso. Extremadura tiene la suerte de tener entre sus poetas y músicos al autor de un himno universal. Si Pablo Guerrero en vez de haber nacido en Esparragosa de Lares lo hubiera hecho en una gran capital europea o americana ahora estaría probablemente al mismo nivel de reconocimiento público que Bob Dylan o Leonard Cohen . Hace cuarenta años que compuso una canción llamada A cántaros , que clamaba un cambio hacia la justicia y la igualdad social frente a los poderosos. Cuatro décadas después la situación es la misma, o casi. Ahora el tirano es el mercado, más invisible, más sutil, pero al fin y al cabo quien nos ata a pesar de que estamos 'hechos de nubes'. Sorprende la terrible vigencia de esta canción, comparable a temas como A galopar (Paco Ibáñez-Alberti ), Al vent (Raimon ), La estaca (Lluís Llach ), El canto a la libertad (José Antonio Labordeta ), o Al alba (Aute ). Pablo Guerrero es el único extremeño que ha ofrecido un recital en el Olympia de París. Y uno de los que con más fuerza se opuso a la Central Nuclear de Valdecaballeros. Fue el primero en denunciar todo lo que ahora se cierne sobre nosotros. Ahora su 'memoria de humo' se pierde en la niebla de los años. Sus pulmones y su voz tienen el timbre ajado del paso del tiempo. El próximo 11 de abril dará un concierto en el Teatro Fernando de Rojas de Madrid recordando los 40 años de A cántaros . . El y Luis Pastor nos recuerdan que los cantautores no han muerto, aunque a algunos les gustaría que sus voces no siguieran denunciando injusticias. Refrán: Abril abrilero, cada día dos aguaceros .