martes, 29 de abril de 2014

Los sherpas y el Día Mundial de la Seguridad

Ayer fue el Día Mundial de la Seguridad y la Salud en el Trabajo. Y no puedo dejar de acordarme de una de las profesiones con más riesgo y menos reconocidas del planeta: los guías del Everest. Los sherpas, grupo étnico especializado en esta función, viven al pie de esta montaña del Nepal esperando a los adinerados occidentales que quieren coronar las cimas del Himalaya. Son los sherpas quienes reúnen las condiciones físicas y humanas --destacan por su honestidad-- para realizar un duro trabajo en un pico a 8.848 metros de altura. En los mentideros a las faldas del Everest se dice que si le pagas bien un sherpa te lleva en su lomo hasta la cima. Sea verdad o no este chascarrillo, lo cierto es que despejan el camino, colocan las cuerdas para subir, portan las tiendas y las bombas de oxígeno a sus espaldas. Después, toda la gloria es para los montañeros que llegan a la cima. Hace breves fechas hubo un alud que provocó la muerte de 13 sherpas. Estos han reclamado mejoras en sus condiciones laborales, como un seguro médico y la creación de un fondo para los guías víctimas de avalanchas. El sueldo de un sherpa en comparación con lo que se llevan las compañías que organizan los viajes es mísero, pero es muchísimo en relación con la renta per cápita media: 360 euros anuales. Ellos conocen los riesgos y se juegan el pellejo por casi nada. Aquí en el supuesto 'primer mundo' nos quejamos por minucias. Aunque aún queda muchísimo por mejorar las condiciones de seguridad de los trabajadores, no olvidemos hoy a los que su trabajo es arriesgar la vida a diario. Refrán: Trabajar es virtud, pero trabaja tú.
Los sherpas y el Día Mundial de la Seguridad ( El Periódico Extremadura - 29/04/2014