martes, 30 de agosto de 2016

Manada

Manada era el nombre del grupo de mensajería instantánea al que estaban conectados los cinco detenidos por presuntamente violar a una muchacha de 19 años en las pasadas fiestas de Pamplona. Nunca un nombre de grupo de Whatsapp ha estado mejor puesto. 'Manada' sirve para designar a las bestias domésticas cuando andan juntas o para nombrar a un grupo de animales salvajes de la misma especie que deambulan unidos para cazar, como los lobos. En la manada la responsabilidad se diluye hasta desaparecer y los actos vandálicos se atribuyen a intangibles como que "la peña se volvió loca" o se niegan sistemáticamente. Lo que hace una manada queda para sus integrantes, que fuera de ella no son nada ni nadie, apenas unos hampones de mala muerte. La conversación de mensajería instantánea de la 'manada' no tiene desperdicio. El texto revela una riqueza de vocabulario propia de un párvulo y una catadura moral incalificable. No sólo se jactan de cometer un horrible delito violentando a una mujer de 19 años entre los cinco, sino que son tan descerebrados que hacen un vídeo cometiendo el hecho: Follándonos a una entre los 5 / Jajaja / Todo lo que cuente es poco / Puta pasada de viaje / Hay vídeo .
Siento una profunda vergüenza por el ser humano, capaz de este comportamiento vil. Me parece todavía peor que miembros de la seguridad del Estado participaran en esta cacería sin piedad. Pido que sean inhabilitados para pertenecer a esos cuerpos armados. ¿Qué podemos esperar de un garante de nuestra tranquilidad que comete el peor de los crímenes contra una mujer, prácticamente una niña?

No envidio a su abogado que, como estrategia, arguye el consentimiento de la víctima. Menos mal que hay un vídeo de los hechos, de lo contrario la sombra de la duda serviría para hacer más daño a la muchacha. No he estado en los Sanfermines ni sé qué puede llevar a una locura criminal a los participantes en una fiesta. Espero que sean condenados. La chica tendrá secuelas de por vida. Y estas últimas desapariciones de mujeres me inquietan cada día más. Refrán: Por un borrego no se juzga la manada".